Hospital Comarcal en Montilla. Córdoba

El Hospital Comarcal de Montilla se ubica fuera del casco, conectado por vías principales de acceso a la población desde los puntos de influencia de la Comarca. La superficie del solar donde se sitúa es de           85 297 m².

Debido a su localización y a la intensidad de tráfico que generará el Hospital se han realizado accesos propios que han dado lugar a la nueva Variante Este de Montilla,  en el itinerario de la carretera A-309, de Montoro a Puente Genil.

Dada la dispersión del entorno, se proyecta un edificio compacto, de dos plantas de altura, masivo al exterior y abierto al interior con patios y vacíos iluminados cenitalmente que perforan el volumen produciendo amplios y luminosos espacios.

La complejidad y organización que requiere el programa para el correcto funcionamiento del centro ha llevado a un esquema en doble peine, en el que los patios resultantes dan lugar a “espacio tranquilos” creando jardines interiores que iluminan y ventilan a la vez que permiten organizar los recorridos y distribuyen las áreas del centro.

Este esquema de paquetes funcionales permite además de la adecuada intercomunicación de todas las áreas, un absoluto control sobre las circulaciones privadas y públicas. De esta forma se destina la banda Este a uso público relacionada con el vestíbulo, cafetería y administración, y la banda Oeste como contenedora de las áreas de cirugía y urgencias, y una galería que permite las circulaciones privadas conectando con todas las áreas médicas. Alternadas con patios ajardinados, entre y perpendiculares a las anteriores, tres bandas alojan las consultas externas, rehabilitación, diagnóstico, laboratorios, hospitalización normal y de especial vigilancia.

La disposición de todas las circulaciones y relaciones verticales, e instalaciones, en estas franjas facilita la posibilidad de una ampliación futura del hospital total o parcial, elevando el número de plantas de aquellas áreas que lo requieran y de las pastillas perpendiculares, optimizando así los recorridos e instalaciones. Pues una ampliación horizontal produciría la dispersión organizativa y formal del edificio, además de las dificultades derivadas de la topografía y dimensiones de la parcela.